Significación clínica de biomarcadores en el síndrome metabólico

  1. García Domínguez, Gloria Jesús
Dirigida por:
  1. Juan Bosco López Sáez Director

Universidad de defensa: Universidad de Cádiz

Fecha de defensa: 10 de febrero de 2016

Tribunal:
  1. Antonio Grilo-Reina Presidente/a
  2. José Luis Andrey Guerrero Secretario
  3. Florentino Carral Sanlaureano Vocal
Departamento:
  1. Medicina

Tipo: Tesis

Teseo: 405691 DIALNET

Resumen

El síndrome metabólico, definido por la presencia de obesidad abdominal, dislipemia, hipertensión arterial y alteración de la glucemia en ayunas, según los criterios del NCEP: ATP III, es una entidad controvertida, con una prevalencia en aumento en los últimos años, debido a la alimentación y hábitos de vida sedentarios de la vida moderna. Recientemente, se considera a la obesidad como un estado inflamatorio crónico de bajo grado, y que además podría actuar como glándula endocrina, liberando citocinas como la IL-6, TNF alfa... Con nuestra investigación buscamos comparar la relación entre las concentraciones plasmáticas de las citocinas IL-6, VEGF y PCR en enfermos con síndrome metabólico y en sujetos sanos, a fin de conocer si presentan relación las concentraciones de éstas y los diferentes componentes del síndrome. Tras numerosos análisis estadísticos, hemos llegado a las siguientes conclusiones: PRIMERA. La mayor parte de los sujetos con síndrome metabólico son diagnosticados por reunir tres criterios diagnósticos. SEGUNDA. Los enfermos diagnosticados de síndrome metabólico mostraron incremento en las concentraciones de las citocinas IL6 y VEGF, al compararlos con controles sanos, tanto globalmente considerados como por edades. En cambio, no hemos encontrado diferencias en el caso de la PCR. TERCERA. Los valores séricos del VEGF, IL-6 y PCR, no varían con la edad ni con el sexo tanto en individuos normales como en enfermos con síndrome metabólico. CUARTA. Hemos encontrado diferencias entre los valores séricos de las variables estudiadas tanto entre los hombres sanos y enfermos, y entre las mujeres sanas y enfermas, pero sólo con una edad igual o superior a 60 años. QUINTA. Hemos encontrado correlaciones positivas entre el colesterol, triglicéridos, perímetro abdominal y presión arterial, con el VEGF. Entre triglicéridos y perímetro abdominal al considerar a la IL6, y una correlación negativa entre colesterol y la IL6. Mientras que las demás correlaciones han sido de significación débil. SEXTA. La medida del perímetro abdominal exhibió aumento al compararlo con los controles, considerándose los valores referenciados por NCEP/ATP III. Este comportamiento va ligado al aumento del la IL6 y del VEGF. SÉPTIMA. Las altas cifras de presión arterial están asociadas a un mayor valor sérico del VEGF. OCTAVA. Cuando hemos considerado el valor de SCORE equivalente al riesgo elevado, comprobamos que todas las curvas ROC estaban más separadas a la diagonal, pero por debajo de la cifra de 0.80, por lo que en este caso indicaría una mejor valoración del riesgo cardiovascular. NOVENA. El análisis de las curvas ROC de todos y cada uno de los biomarcadores tanto individualmente, como en paralelo, permite concluir que todos ellos muestran una sensibilidad y especificidad muy valorable para el diagnóstico de síndrome metabólico, ello viene a enfatizar la potencial importancia del valor de la IL6 y del VEGF en patogenia del síndrome metabólico. DÉCIMA. Dado que en nuestra muestra se ha encontrado que el síndrome metabólico es más prevalente en mujeres que en hombres, mediante el análisis con curvas ROC hemos demostrado que existen diferencias, siendo los resultados mejores en el caso de las mujeres con SM que en los varones con SM. UNDÉCIMA. Establecemos que la II-6 se han asociado con la mayoría de parámetros metabólicos y antropométricos asociados a la adiposidad, presentando una importante implicación fisiopatológica, tanto en la obesidad como en las comorbilidades asociadas al síndrome metabólico. DUODÉCIMA. Usando el análisis factorial, también en esta ocasión el análisis concluyó que un único factor latente explica adecuadamente la interrelación, no sólo entre los rasgos que se acepta definen al síndrome, sino también la que éstos mantienen con el VEGF y la IL-6.