Validez y fiabilidad de instrumentos para la evaluación de la actividad física, el tiempo sedentario y la movilidad funcional en la población mayor

  1. De La Cámara Serrano, Miguel Ángel
Dirigida por:
  1. Oscar L. Veiga Director/a

Universidad de defensa: Universidad Autónoma de Madrid

Fecha de defensa: 11 de octubre de 2019

Tribunal:
  1. Juan Miguel Fernández-Balboa Presidente/a
  2. Carlos Mª Tejero-González Secretario/a
  3. Ignacio Ara Royo Vocal
  4. Vanesa España Romero Vocal
  5. Carlos Celis Morales Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

Esta tesis doctoral se centra en la fiabilidad y validez de diferentes instrumentos para la valoración de la actividad física, el comportamiento sedentario y la movilidad funcional en el adulto mayor. Se establecieron tres objetivos generales: (i) examinar la fiabilidad y variabilidad entre días de medición de diferentes patrones de actividad en el adulto mayor, así como estimar el número de días de monitorización necesarios para proporcionar una estimación confiable de varios patrones habituales de movimiento y no movimiento; (ii) examinar la validez de preguntas que se refieren a actividades físicas o comportamientos sedentarios de diferentes cuestionarios en el adulto mayor y (iii) examinar la validez de un test clínico para evaluar la movilidad funcional y la salud en adultos mayores. El estudio se ha llevado a cabo dentro del Estudio IMPACT 65+, el cual estuvo financiado por el Ministerio de Economía, Industria y Competitividad a través del Programa Estatal de I+D+i Orientado a los Retos de la Sociedad, y cuyo objetivo principal fue valorar de forma objetiva, entre otros indicadores de salud, los niveles de actividad física, el síndrome de fragilidad y la calidad de vida en dos cohortes; una epidemiológica (con una muestra representativa de más de 2700 participantes) y otra clínica de sujetos españoles de 65 años o más. La muestra incluida en esta tesis pertenece a la cohorte clínica, la cual alcanzó los 607 participantes (224 hombres y 383 mujeres) con unas edades comprendidas entre los 65 y los 92 años y una edad media de 71.8 años (DT = 5.4). Para evaluar la actividad física y el comportamiento sedentario se utilizaron medidas subjetivas como el cuestionario GPAQ y EPIC. Asimismo, para examinar el tiempo en actividades físicas y comportamientos sedentarios, comprobar la fiabilidad temporal de diferentes patrones de actividad y evaluar la validez del test clínico, se utilizó una medida objetiva como el monitor de actividad IDEEA. Los resultados de la presente tesis doctoral sugieren que (i) el tiempo pasado en diferentes comportamientos de movimiento y no movimiento es consistente en la población mayor, observándose un bajo porcentaje de variación entre días de medición. Además, los patrones de no movimiento presentaron una mayor fiabilidad inter-día que los patrones de actividad, mostrando que entre 1.2 y 3.5 días de monitorización con el monitor IDEEA pueden ser suficientes para lograr una fiabilidad moderada-buena para diferentes comportamientos de movimiento y no movimiento en adultos mayores. (ii) Tanto la pregunta acerca del tiempo en caminar del EPIC como del tiempo en comportamientos sedentarios del GPAQ mostraron asociaciones pequeñas cuando se compararon con una medida objetiva en adultos mayores, presentado una insuficiente validez. Ambas preguntas subestimaron una parte muy relevante del tiempo dedicado a estos comportamientos (en torno a una hora diaria de caminar y alrededor de 2 horas al día en comportamientos sedentarios), lo que afectaría a las estimaciones que estos cuestionarios realizan. (iii) La velocidad de la marcha se asocia con varios resultados de salud. Sin embargo, los diferentes métodos para evaluar la velocidad habitual de la marcha en el adulto mayor difieren en las estimaciones de la velocidad promedio y muestran discrepancias con la velocidad habitual evaluada de forma objetiva. Estos resultados ponen en cuestión la validez de los métodos subjetivos para valorar la actividad física y los comportamientos sedentarios en la población mayor, produciendo una medición inexacta de los niveles de actividad física y sedentarismo que podrían reducir las asociaciones o presentar sesgos cuando se relacionen con la salud. La velocidad habitual al caminar evaluada mediante un test clínico se asoció a diferentes resultados de salud, lo que indicó una suficiente validez de constructo. El test clínico de caminar sobre una distancia de 2.44 m mostró patrones de asociación similares a los obtenidos mediante una medición objetiva en el entorno ambulatorio. Sin embargo, los diferentes métodos para evaluar la velocidad habitual al caminar no pueden superponerse o compararse directamente, por lo que en la práctica clínica o en la investigación debe mantenerse el mismo método.