La región de Priego de Córdoba (Kurat Baguh) en el proceso de formación de al-Andalus (siglos VIII-XI)

  1. CANO MONTORO, ENCARNACIÓN
Supervised by:
  1. Virgilio Martínez Enamorado Co-director
  2. Antonio Malpica Cuello Co-director

Defence university: Universidad de Granada

Fecha de defensa: 21 January 2013

Committee:
  1. Mohamed Meouak Chair
  2. Alberto García Porras Secretary
  3. Rosa Varela Gomes Committee member
  4. Elena de Jesús de Felipe Rodríguez Committee member
  5. Pierre Guichard Committee member

Type: Thesis

Abstract

La Tesis Doctoral ¿LA REGIÓN DE PRIEGO DE CÓRDOBA (KURAT BAGUH) EN EL PROCESO DE FORMACIÓN DE AL-ANDALUS (SIGLOS VIII-XI)¿ cuya dirección ha estado al cargo de don Antonio Malpica Cuello catedrático de Historia Medieval en la Facultad de Filosofía y Letras y don Virgilio Martínez Enamorado Doctor en Historia, es un trabajo que ha venido determinado por el deseo de realizar un estudio de poblamiento durante el proceso de formación de al-Andalus en una zona donde este aspecto permaneciese prácticamente inédito. La zona elegida fue la comarca de Priego fundamentalmente por dos razones, primero porque la doctoranda es oriunda de allí, y en segundo lugar porque esta región llegó a conformar una unidad de máximo rango administrativo durante el gobierno omeya andalusí. Igualmente hay que destacar el hecho de que a nivel territorial no se había realizado hasta el presente un planteamiento general que englobara en su conjunto a la comarca de Priego (Baguh) durante el momento en que llega a conformarse como kura de la administración omeya. El trabajo presentado es un planteamiento general de todos aquellos aspectos con un potencial aún no agotado en los que se podría llegar a profundizar más a partir de análisis polínicos, geoquímicos o isotópicos para las terrazas de cultivo o de levantamientos topográficos para acequias y husun situados en cotas altas de la comarca pertenecientes casi en su totalidad a la fitna de fines del siglo IX y principios del X. La falta de medios nos ha impedido realizar todas estas tareas con la profundidad que hubiesen requerido, no obstante esperamos que este trabajo sirva como antecedente para otro que pueda desarrollar con la hondura pertinente los aspectos ya señalados en un futuro no muy lejano. Los objetivos perseguidos fundamentalmente han sido los siguientes: 1. Aportar información al conocimiento histórico andalusí de la comarca de Priego entre los siglos VIII y XI estableciendo patrones de asentamiento tanto en la medina que llegará a ser hadira de su propia demarcación administrativa como en el territorio dependiente de ella. 2. Aunar junto al conocimiento de las fuentes escritas las evidencias arqueológicas de la zona para plantear una hipótesis de trabajo acerca de la fundación de la medina y el papel desempeñado por esta como centro político de una kura. 3. Establecer cuales son los límites de esa demarcación provincial. 4. Configurar ese territorio de la cora de Priego a partir de la identificación y descripción de los espacios de cultivo irrigados tanto en la medina por una parte y como en las alquerías dependientes por otra. El trabajo puede dividirse en su conjunto en dos grandes bloques: Un primer bloque que se correspondería a la primera parte del trabajo donde se hace un planteamiento teórico de cada uno de los aspectos en los que hemos desgranado la investigación, y un segundo bloque donde se ha hecho un estudio del registro arqueológico conocido hasta la fecha de cada uno de los yacimientos encuadrados entre los siglos VIII y XI tanto en la medina como en la comarca. Atendiendo al primer gran bloque del trabajo hemos realizado varias divisiones con sus apartados correspondientes. El primer capítulo del trabajo se ha dedicado al establecimiento de un patrón de asentamiento en la zona concreta de estudio. El problema fundamental con el que nos hemos encontrado a la hora de abordar este aspecto ha sido la poca información material arqueológica disponible para dicho periodo inicial andalusí en la comarca de Priego, lo que se ha unido además a la escasez de fuentes escritas que hagan referencia al establecimiento de grupos clánicos dentro del territorio estudiado. En cuanto a la configuración de la kura bagí, a falta de límites establecidos por fuentes escritas contemporáneas a los siglos IX o X, hemos tenido que valernos de documentos de delimitación de términos entre Priego y otros territorios cercanos redactados ya en la baja Edad Media o a principios de la Edad Moderna. Asimismo se ha tenido presente si algún enclave aislado y cercano a estas fronteras comarcales podía o no identificarse con rábitas de delimitación, y en caso de existir qué papel jugaron éstas dentro de las comunidades clánicas más cercanas. En base a ello hemos delimitado la extensión ocupada por la cora de Priego dentro de la zona sur de la Península que como se advierte en el trabajo no fue muy extensa. Como ya se ha apuntado uno de los propósitos de nuestra investigación ha sido esbozar aspectos generales de este periodo concreto en el que la kura de Priego se forma, estabiliza y desaparece. A medida que íbamos avanzando en el estudio propuesto los datos han ido revelando una dicotomía que va a prolongarse prácticamente hasta el final del gobierno omeya andalusí en esta zona en concreto, siendo esa dicotomía la firme defensa que se va a dar por un lado desde el centro aglutinador de esta demarcación administrativa, osea desde su capital Baguh, del Estado cordobés, y por otro la oposición que se realiza contra el mismo y dependiendo de qué grupos clánicos sean sus habitantes desde otros enclaves del entorno más cercano. Nuestro planteamiento territorial ha barajado la posibilidad de dos variantes cronológicas respecto a lo que será la conformación espacial de la cora de Priego. Una primera cora con anterioridad a la fitna del siglo IX, en la cual no se incluye el término municipal de la actual Almedinilla, la Wasqa de las fuentes árabes, dependiente todo parece indicar hasta ese momento de Qalat Yashub, la actual Alcalá la Real, y otra segunda delimitación en la que ya se incluye el territorio de Almedinilla una vez que se ha conseguido desmantelar a los sublevados de los husun de la fitna hafsuní por parte del gobierno omeya, entre los que se encuentran los rebeldes parapetados en el hisn de Wasqa. La línea del distrito administrativo de Baguh por tanto seguiría prácticamente igual que el límite comarcal actual, incluyendo además por el este la comarca de Almedinilla y por el oeste el término municipal de Carcabuey. En cuanto al estudio de la medina de Baguh el impedimento principal que ha obstaculizado la investigación de su evolución una vez más ha estado en la falta de datos arqueológicos anteriores al siglo XII. En cualquier caso una posición geoestratégica y unos aportes hídricos abundantes parecen ser las razones fundamentales del asentamiento primitivo andalusí en el Barrio de la Villa. En el capítulo de la división territorial de la comarca de Baguh las fuentes escritas han sido las que han determinado la nomenclatura aplicada a la misma dependiendo del momento cronológico en el que hayan sido redactadas. Así, se ha podido evidenciar para un primer momento que el territorio de Priego formaría parte de la kura de Elvira, alcanzando ya en el siglo IX el grado de kura independiente. Más tarde pasará a ser de nuevo un distrito de Elvira bajo la denominación de yuz¿, acabando por ser calificada como iqlim también dentro del territorio granadino ya en el siglo XIII. El estudio de los espacios irrigados ha sido uno de los aspectos más motivadores del trabajo aunque solo sea como planteamiento general de cara a otro tipo de investigación más analítica. El diseño de los espacios irrigados en Priego, al igual que en tantos otros lugares andalusíes, mantiene a pesar de las variantes oportunas que se han producido a lo largo de los siglos el sello evidente de su origen andalusí. En el planteamiento propuesto hemos establecido una diferencia entre el espacio de cultivo irrigado cercano o anexo a la medina y el de las alquerías con registro arqueológico asociado entre los siglos VIII y XI d. C. En el caso de la medina el caudal de la Fuente del Rey es el motor del primigenio espacio de cultivo irrigado que se sitúa bajo el acantilado de travertino donde se ubicó el asentamiento origen de la ciudad bagí. El cauce por inclinación natural del terreno queda dividido en dos ramales principales al final de la calle Ribera, pasando a rodear el espacio original de la medina (que es el espacio que conforma el Barrio de la Villa), hasta llegar al tajo del Adarve a partir del cual y por medio de acequias secundarias, que sí han variado a lo largo del tiempo y hasta su desembocadura en el Río Salado, van a dar riego a los cultivos que se dividen en diferentes niveles de terrazas para el sembrado. El modelo observado parece corresponderse con un diseño irrigado andalusí; no obstante un análisis de tierras en cada nivel de terraza nos ayudaría a establecer una datación absoluta del momento en que fueron creadas así del cómo y cuando se van añadiendo nuevos espacios al campo de cultivo a medida que el incremento demográfico va pidiéndolo. En el caso de las alquerías debido a la falta de excavaciones sistemáticas nuestro estudio se ha tenido que basar en la ubicación de aquellos yacimientos citados en la Carta de Riesgo con manantiales de agua y material adscrito a los siglos VIII-XI que hayan dado lugar a pequeños asentamientos de tipo rural. En algunos de estos yacimientos pervive igualmente un diseño estructurado en diferentes niveles de sembrados. Un capítulo muy importante en nuestro trabajo ha sido tratar de esbozar lo más detalladamente posible la importancia que tuvo en la comarca de Baguh la fitna hafsuní, la cual marca toda la evolución histórica de la región desde el último cuarto del siglo IX hasta el año 922 en el que se logran reducir los últimos enclaves rebeldes de la región. Un clan, el de los Banu Mastana va a encabezar esta lucha en la comarca, sin embargo y según las crónicas existen otros grupos clánicos que también van a oponer resistencia al Estado cordobés en el territorio de Baguh. En base a los datos recopilados tanto de fuentes escritas como del registro arqueológico se han podido situar los husun de la fitna del siglo IX-X localizados en el territorio bagí. Desde estos enclaves situados en puntos altos se lanzarán incursiones en contra de los intereses del gobierno omeya que se encuentran fundamentalmente concentrados en la medina y sus alquerías. Y aunque puedan parecer focos unificados en esa oposición al Estado, los textos escritos dicen que son varios grupos segmentarios, árabes o beréberes, los que controlan los distintos enclaves en altura del territorio. Así Isbarragira al norte estará en manos de los beréberes Banu Muhallab, Wasqa al este lo estará en manos árabes yemeníes, Banu Ans, y Carcabuey o Sahla por ejemplo lo estarán en manos de los Banu Mastana. En la actualidad todos estos husun se encuentran sin excavar y por tanto totalmente inéditos. Una actividad arqueológica sistemática al menos en uno o dos de estos enclaves reportaría mucha información acerca del desarrollo de la fitna en un lugar periférico con respecto al centro originario de esta insurrección localizado en Rayya. Precisamente es esta conformación geológica de la comarca donde las sierras calizas han dado lugar por disolución con el agua a numerosas cavidades naturales, lo que ha propiciado la utilización de las mismas a lo largo del tiempo. La Edad Media no queda exenta a esta utilización contabilizándose varios tipos de ocupación en cueva en la comarca: estarían aquellas que se utilizaron como mero refugio de pastores, otras que tuvieron función de rábitats y otras que fueron utilizadas por grupos más o menos amplios en sexo y edad como lugares de habitación por un tiempo prolongado según las evidencias encontradas en superficie dentro de las cavidades. Esas evidencias hablan de grupos establecidos en las cavidades en un momento cronológico determinado que puede relacionarlos con una afiliación a la dinastía omeya tras la caída de ésta a comienzos del siglo XI. En cuanto al Bloque II del trabajo en lo que se refiere al estudio del registro arqueológico, éste se ha dividido en evidencias arqueológicas en la medina y evidencias arqueológicas de la comarca y dentro de ellas hemos dividido a la vez las evidencias estructurales de las materiales. Dentro de los materiales además se ha procedido a diferenciar los materiales cerámicos, los más abundantes sin duda, de los no cerámicos. Basándonos en los yacimientos recopilados en la Carta de Riesgo de Priego hemos podido confeccionar un plano en donde se sitúan los yacimientos de época emiral, califal y postcalifal dentro de lo que fue la cora de Priego. Finalmente este trabajo, y a partir de los datos recopilados, nos ha permitido llegar a una serie de conclusiones: ¿ Probable el nacimiento de la medina de Baguh se establezca a raíz del asentamiento de miembros samiyyun en el Barrio de la Villa ¿ Hay una relación directa entre el clan o clanes que ocupan el asiento del Barrio de la Villa y otros enclaves de la comarca de Baguh con la creación de una nueva demarcación territorial por parte de la administración omeya ¿ La delimitación de la nueva kura de Baguh guarda los mismos límites que la antigua Ipolcobulcula (Carcabuey) como demarcación perteneciente al obispado de Elvira aunque con cambio de cabeza de partido en la nueva medina establecida en el antiguo pagus de Priego ¿ Los asentamientos tanto en el Barrio de la Villa como en otras alquerías del territorio bagí se establecen de acuerdo al planteamiento hidráulico del resto de enclaves agrarios andalusíes. En sentido descendente: medina o alquería, fuente de agua y tierras de cultivo ¿ Puede establecerse una relación entre los clanes que se asientan en la medina de Priego y la comarca dependiente de ella con su afinidad u oposición al gobierno omeya cordobés durante la fitna del siglo IX-X ¿ El patrón de asentamiento junto al medio físico determina la ocupación de ciertas cavidades de la comarca durante el periodo que sigue a la caída del gobierno omeya