El consentimiento informado en la relación clínica. Percepción del dentista, personal sanitario y población general

Resumen

Introducción: La relación clínica ha sufrido grandes cambios en los últimos años, constituyendo el consentimiento informado uno de los temas que generan más incertidumbre. Analizaremos si las profesiones sanitarias han sabido asimilar este rumbo y si el paciente es consciente del derecho que se le ofrece, tratando de identificar opiniones y controversias sobre el consentimiento informado en la relación clínico-asistencial. Material y método: Estudio descriptivo observacional. Se han seleccionado tres grupos poblacionales entregándoles un cuestionario anónimo con preguntas acerca de la materia objeto de estudio. Se ha utilizado el programa Statgraphics Centurion versión XVII. Resultados: Se obtienen 1000 encuestas cumplimentadas. El 89´39% de población general, 81´14% de dentistas y 77´10% de personal sanitario suscribe que la información se debe proporcionar siempre de forma verbal y escrita (p=0’0000). El 77’29% de dentistas no reconoce al personal auxiliar responsable de informar al paciente (p=0’0000). El 40% de encuestados facilitaría información a pacientes que carecen totalmente de capacidad. El 66’38% del personal sanitario y el 63’41% de población general delega el consentimiento informado en menores con 16 años y capaces, frente al 76’77% de dentistas (p=0’0001). Discusión: Los encuestados no conocen exactamente los contenidos mínimos o cómo suministrar la información clínica al paciente tal como recoge la legislación actual. El dentista, prefiere que el personal auxiliar no intervenga en el proceso de información. Las cuestiones sobre la capacidad, el derecho a no ser informado, la mayoría de edad sanitaria y el consentimiento por escrito generan inquietud y diversidad de opiniones. El concepto de consentimiento informado no es un acontecimiento aislado de informar al paciente sobre un documento escrito para conseguir su rúbrica sino una sucesión de hechos en los que debe prevalecer el respeto a la autonomía, la comprensión en el proceso y un sanitario responsable. Conclusión: El sanitario desconoce el marco jurídico que regula el Consentimiento Informado, además de crearle dificultad e indecisiones morales. La mejora de la alfabetización sanitaria es un aspecto clave para que la población pueda comprender el alcance de la toma de decisión en el ámbito de la salud. Resulta esencial implementar mejores estrategias de formación, generando un escenario claro de actuación en entornos sanitarios.