Un proyecto frustrado de Compañía General de Comercio de los Países Bajos en tiempos de Carlos II

Resumen

Los flamencos, súbditos de la Monarquía Católica, no se conformaron con ocupar en ella un lugar secundario en el plano económico. A lo largo del siglo XVII, ante la competencia de holandeses, ingleses y franceses y, en particular, de las grandes compañías comerciales monopolísticas de estos países, fueron varias las propuestas que hicieron a la Corona, con vistas a aprovechar mejor los ricos recursos del Imperio y a tomar ellos mismos un mayor protagonismo. El presente artículo estudia un ambicioso proyecto para la formación de una Compañía General de Comercio para los Países Bajos, surgido en torno a 1690-91. Se analiza, ordenadamente, su contenido, el marco en que surgió esta iniciativa y las vicisitudes por las que pasó, con intervención del monarca y de las altas instituciones del Estado, tanto españolas como flamencas, hasta principios del siglo XVIII en que quedó sin efecto la idea. Se utilizan fuentes procedentes de archivos españoles y belgas