La ciudad romana de la Mesa de Gandul como emplazamiento de Iripo y en relación a Lucurgentum y Alcalá de Guadaíra

Resumen

Este trabajo trata sobre la entidad urbana de los restos arqueológicos romanos de la mesa de Gandul, a partir de los estudios previos sobre el mismo de Ponsich, Amores, Buero y Florido, Hernández Díaz, Meléndez y Keay. Seguidamente analiza la epigrafía latina urbana procedente de la mesa de Gandul. Algunos autores han situado en este lugar la ciudad de Lucurgentum, documentada en un epitafio de procedencia desconocida conservado en Alcalá de Guadaíra, y en un epígrafe honorífico hallado en Base Aérea de Morón entre otros restos arqueológicos. La inscripción CIL II 1263 del castillo de Alcalá de Guadaíra, que documenta fragmentariamente el nombre de un municipio, atribuido sin razón a la imaginaria Hienipa y a la vecina Salpensa, no es claro que corresponda a los lugares próximos de Orippo o Irippo, pues podria ser una dedicatoria del municipio de los Ilienses Ilipenses, de Alcalá del Río. La certeza de que el segundo elemento del nombre Irippo (IPPO), significa ‘ciudad’ en turdetano, y de que el nombre preárabe del río Guadaíra es IRA, nos permite relacionar el primer elemento de Irippo (IR) con el nombre prerromano de este río, por lo que resulta muy verosímil que Irippo fuera la principal ciudad turdetana de la Vega del Guadaíra. Los hallazgos de monedas de Irippo en esta vega y en la propia mesa de Gandul, mucho más numerosos que en otras zonas limítrofes y otras regiones de la península; el hecho de que los topónimos turdetanos en -ippo se encuentran en la banda izquierda del Betis; y de que los yacimientos importantes de la zona se encuentran identificados, señalan claramente a la mesa de Gandul como la ciudad de Irippo. Además de las monedas de Irippo encontradas en la comarca que constituye el ámbito comercial de la mesa de Gandul, corroboran esta identificación las relaciones comerciales y numismáticas que existieron entre tres ciudades situadas al sur de Sevilla, Osset en la orilla derecha del Guadalquivir, e Irippo y Orippo que son las dos más próximas en la orilla opuesta, en lo que tal vez el propio río Guadaíra facilitó de algún modo el tráfico comercial.