Los certámenes académicos del siglo XVIII. Mucho más que un proyecto para el cuidado de la lengua

Resumen

Desde su fundación en el año 1713, la Real Academia Española se ha planteado como principal objetivo el cuidado de la lengua, tal y como se advierte en su propio lema. Con la intención de cumplir con este propósito, durante el siglo XVIII los miembros de la institución redactaron, pulieron y editaron sus obras más ilustres: el Diccionario, la Ortografía y la Gramática, que tuvieron, incluso, varias ediciones. Empero, el cuidado de la lengua no se limitó a esos trabajos, sino que, además, la RAE convocó diversos certámenes para promover tanto el buen uso de la Poesía y de la Elocuencia como una serie de ideas relacionadas con los lemas escogidos para los concursos. Las convocatorias de estos certámenes se extendieron a lo largo de los siglos XVIII y XIX, y en ellos participaron desde escritores noveles hasta autores muy reconocidos, como Tomás de Iriarte, Menéndez Valdés, Juan Pablo Forner, José Iglesias de la Casa o Viera y Clavijo. El objetivo de esta investigación es analizar los lemas, las ideas, el lenguaje y las técnicas literarias de las obras que se presentaron a los certámenes convocados por la Real Academia Española durante el siglo XVIII con el fin de relacionarlas con varios hechos históricos, establecer el canon literario académico y deducir criterios estéticos y lingüísticos. Para ello no solo se estudiarán los lemas de cada concurso y se describirán los materiales analizados, sino que también se recurrirá al examen del contenido de las obras manuscritas presentadas a los premios, de donde se extraerán los datos, las citas y los ejemplos oportunos. Hasta donde sabemos, el material que nos proponemos analizar no ha sido examinado antes desde un punto de vista crítico e interpretativo, a excepción de escasos artículos, o al menos eso es lo que se desprende del estudio de la bibliografía existente al respecto, cuestión de la que también nos ocuparemos. A partir de nuestros análisis, demostraremos cómo los certámenes no solo fueron una iniciativa de la Real Academia Española para el cuidado de la lengua, sino también para influir en la conciencia de la sociedad mediante los temas tratados en los premios, los cuales permitieron dirigir a esa conciencia social a los problemas que la institución consideraba relevantes. Por ende, aunque los lemas de los concursos suelan diferir entre sí, todos coinciden en que abordan asuntos que preocupaban en el siglo XVIII español. De esta manera, los certámenes académicos serían mucho más que un proyecto para cuidar el idioma.