RELIGIÓN, SOCIEDAD Y TERCER ESPACIOLÓGICO

Resumen

La sociedad moderna y la esfera pública actual han restaurado la presencia de la religión en su esfera. Habermas y Taylor se han esforzado por explicar este retorno. Una especie de práctica racional proposicional dentro de la sociedad y el espacio público ha contribuido a establecer la formulación de un marco interpretativo en el que la religión es absorbida, comprendida y clasificada según mecanismos proposicionales que la trasladan al terreno de la no racionalidad. Actualmente se han producido giros epistémicos en el campo de la lógica, la sociología y la filosofía que han permitido construir un nuevo marco para la interpretación de la religión y su función en las sociedades modernas. Este trabajo es un estudio analítico sobre religión basado en un marco interpretativo auspiciado por el concepto de ’tercer espacio lógico’. Para ello se realizará una comparación entre los fundamentos de la lógica formal y no formal y su relación con el discurso dialéctico desde un punto de vista histórico hasta el momento presente. De esta forma se persigue establecer un patrón lógico que responda a las características del concepto de tercer espacio lógico, que pretende ser aquel espacio que permite la coexistencia de contradicciones, A y -A. El intento de comprender el pensamiento metafísico dentro de una concepción lógica se basa en la estructura del tercer espacio lógico. Se entiende que es el que permite que en él se discutan todas las posibles contradicciones que se puedan dar. Cada una con una legitimidad lógica sin limitar la racionalidad de la comprensión en la proposición o su contradicción sino en la proposición y su contradicción. El tercer espacio permite la existencia de esta operación dialéctica en cuyo dinamismo se forma la racionalidad natural.Esta propuesta parte de una percepción que considera que el tercer espacio lógico constituye el marco interpretativo adecuado para tratar cuestiones de índole racional que no se corresponden con las exigencias de la lógica formal o de la razón proposicional. Esta implicación lógica se aplica a la realidad de una práctica conceptual como la religión. Por lo tanto el encuadre del tratamiento filosófico de la religión debe tener lugar dentro de las sugerencias conceptuales y lógicas que garantiza el tercer espacio lógico para el proceso de interpretación del valor religioso.